Hoy, caminando, redescubro lo impactante que resulta el cielo...
A borbotones, se van formando tremendas nubes que se agolpan tridimensionalmente desde donde las admiro y reflejando la luz del sol en ellas parecen invitarme a caminar a su lado...
Hoy, caminando, vuelvo a sentir el gélido aliento que las esparce por el horizonte azulado que esconden y apuran su marcha cuanto más quieta me quedo mirándolas...
Hoy, caminando, simplemente me han embaucado en su suave movimiento y me han recordado lo pasajera que es la vida... en un abrir y cerrar de ojos, los míos, que son los que en esos momentos las observaban...
Y al terminar mi camino, me quedo con los contrafuertes de una Iglesia que encuentro en la selva urbana de este día frío, que parecen asomar al cielo para apoyar en él, el cansancio del tiempo.
Iglesia Nuestra Señora de Gracia, la Torre, Valencia.